viernes, 29 de noviembre de 2013

Envíos difíciles vs envíos fáciles

"Un jamón a New York es dificil de mandar, pero pistolas y carabinas no hay ningún problema."

Esos locos bajitos

Hay una cosa que me maravilla de los niños pequeños, su capacidad para alcanzar las metas que se ponen como objetivo. Me explico, todos hemos visto a chavales practicando con un monopatín en parques, plazas y demás emplazamientos urbanos tratando de hacer diversa clase de perrerías sobre distintos elementos del mobiliario urbano. Pues bien, fijaos en ellos, chavales de diez o doce años, tratando de saltar desniveles de más de metro y medio sobre una tabla que se mueve, o saltando escaleras o deslizándose sobre barandillas. La cantidad de golpes que se pegan y las veces que tienen que intentarlo hasta que lo logran tienden a infinito. Ahora decidme cuantas personas  que vayan tirando hacia la época adulta estarían dispuestos a intentarlo sabiendo que se van a caer innumerables veces y que van a tener que practicar otras tantas.

Niños haciendo skate
Otro ejemplo, los críos que se empeñan en dar una serie de toques con un balón de una forma determinada. Aquí los golpes, en la mayoría de los casos, no van a tener consecuencias letales, pero el número de repeticiones hasta lograr el hito puede ser muy elevado. Muy poca gente en la edad adulta está dispuesta a dedicarle tanto tiempo y esfuerzo a algo, hasta alcanzar un objetivo que se propone, y más si su integridad física corre el más mínimo riesgo.

Creo que me entendéis, los niños si se fijan un objetivo lo alcanzan cueste lo que cueste, o al menos lo intentan con ganas y ambición, mientras que la mayoría de los adultos en muchos casos ni tan siquiera llegan a la fase de plantearse los objetivos. ¿Qué cambia al irnos haciendo adultos? Aquí van algunas ideas.

En primer lugar una causa por la que los adultos no emprenden gran parte de sus ideas, y ni tan siquiera tratan de alcanzar ciertas metas es el miedo al fracaso, o en muchos casos a lo que piensen los demás de ese posible fracaso. La palabra fracaso no se encuentra en el diccionario de los niños, sin embargo gran parte de los adultos la tienen demasiado presente. Mucha gente cuando piensa en cambios u objetivos piensa más en lo que puede perder, económica o socialmente, que en todo lo que puede ganar. La mentalidad de los chavales es completamente opuesta.

En otros casos no es el miedo al fracaso lo que frena a la gente sino el conocimiento del esfuerzo que requeriría alcanzar el objetivo fijado. Los niños por el contrario ni tan siquiera se plantean el esfuerzo que será necesario, ellos quieren alcanzar su meta y punto, tarden lo que tarden, tengan que repetirlo diez, cien o mil veces. La verdad es que tengo la sensación de que la mayoría de la gente con el paso del tiempo se vuelve cómoda, sobre todo cuando alcanzan un cierto nivel de vida. Quiero decir, tienen su vida y no tratan ni quieren hacer ningún esfuerzo más allá del que realizan en su vida diaria.

Por último, una gran diferencia entre niños y adultos en esto de fijarse metas y alcanzarlas es que en muchos casos a los adultos les encanta ponerse palos en las ruedas a si mismos. Afirmaciones tales como: “esto es muy complicado”, “que difícil es esto”, “no puedo dedicarle tanto tiempo”, “seguro que esto es imposible”. En lugar de ver la meta cumplida al pensar en lo que desean hacer, hay gente que tan solo ve todas las dificultades que habrá en el camino. Y ciertamente muchas de dichas dificultades se presentarán al intentar transitar el camino hacia la cumbre, pero no pueden verse únicamente las adversidades también hay que verse hollando la cima. Si alguien pone limitaciones a nuestros proyectos que sean los demás o el entorno, pero no te autolapides.

Por todo ello me parece que mejor nos iría si en ciertos aspectos de nuestra vida volviésemos a pensar como un niño. Deberíamos eliminar todos nuestros miedos y limitaciones e intentar saltar ese banzo de metro y medio, repitiendo el salto todas las veces que fuesen necesarias hasta que lográsemos una caída perfecta.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Buscando a otro nivel

"Mi habitación está tan desordenada que quisiera poder darle ctrl + f para encontrar cosas."

sábado, 23 de noviembre de 2013

Magnus Carlsen, el esfuerzo para triunfar

De vez en cuando en el mundo surgen personas excepcionales, que destacan por su habilidad y talento en determinadas facetas o aspectos. Pues bien, una de esas fuerzas imparables de la naturaleza ha tomado forma en el noruego Magnus Carlsen, quien muchos no conoceréis si no estáis al tanto del deporte de los 64 escaques. Para ponernos en situación, el tal Magnus Carlsen acaba de proclamarse Campeón del Mundo de Ajedrez a la edad de 22 años, aunque a punto de cumplir los 23. Esta hazaña no ha estado al alcance de casi nadie en la historia del deporte ciencia, de hecho tan solo ha habido dos jugadores previamente que hayan logrado el cetro ajedrecístico a tan temprana edad. Dichos jugadores son Mijaíl Tal, apodado el Mago de Riga que se hizo con el título a la edad de 23 años, y el denominado Ogro de Baku, el incomparable Garry Kasparov.

Magnus Carlsen en el Torneo Tata Steel 2013
Pero no queda ahí la cosa, Carlsen lleva ostentando con mano de hierro la primera posición de la Federación Internacional de Ajedrez desde 2010, esto es, con poco más de 19 años. Y por si todo esto fuese poco, en febrero de 2013 consiguió batir la marca de 2851 puntos Elo que alcanzó el mítico Kasparov en 1999, contando en la actualidad con 2882 puntos. Su inmediato perseguidor, el ruso Kramnik, se encuentra a la astronómica distancia de más de 70 de estos puntos. Para quien no lo sepa, el sistema de puntuación Elo es un método matemático para calcular la habilidad relativa de los jugadores de ajedrez y de otros juegos similares, para qué engañarnos.

Estos son algunos de los hitos alcanzados por este gran noruego. Sin embargo, alcanzar y batir todas estas marcas así como el llegar a ser el Campeón del Mundo de Ajedrez no ha sido fácil. Es evidente que este chaval tiene algún tipo de talento natural para el análisis de posiciones y cálculo de posibles variantes, pero lo que realmente ha hecho posible todas sus hazañas es la gran pasión que muestra por este deporte, así como el esfuerzo y capacidad de sufrimiento.

La parte visible del ajedrez son los torneos, en los cuales varios de los mejores ajedrecistas del momento se enfrentan entre si en partidas que pueden llegar a durar cinco, seis o más horas seguidas. Pero muchas veces no se tiene en cuenta que estos guerreros no van al combate a pecho descubierto, de hecho, muy pocas cosas antes de los torneos se dejan al azar. Los jugadores se preparan concienzudamente, y no con entrenamientos como los futbolistas de 2 horas diarias, no, no, no. Como muchos jugadores han mostrado, dependiendo del periodo del año en el que se encuentren pueden dedicar al ajedrez entre 6 y 12 horas diarias, los cual no es baladí. Piensen en ustedes, ¿a qué estarían dispuestos a dedicarle 14 horas diarias durante digamos tres meses?, pues eso, lo de estos jugadores por el ajedrez es pasión y lo demás son tonterías. Pero tampoco hay que pensar que los ajedrecistas están metidos en una cueva todo el año con sus ordenadores y programas, sus libros y tableros de ajedrez. Una parte fundamental de su trabajo es también distraerse, así como entrenar el aspecto físico. Parece que no, pero durante el transcurso de un torneo que pueden ser 14 días, estar sentado seis horas seguidas durante las partidas y luego Dios sabe cuantas preparando la partida siguiente, cansa.

Carlsen en una rueda de prensa durante el Campeonato del Mundo
Como decía, otra parte importante de su trabajo es desconectar del tablero. A Carlsen le encanta el fútbol como deporte y procura practicarlo, también le gusta el rock y salir con sus amigos, los cuales en ocasiones le acompañan a los torneos. Con ello quiero desmitificar la idea de los ajedrecistas como personas encerradas dentro de si mismas.

Pues bien, a Carlsen la pasión se le nota a raudales, prácticamente en ninguna ocasión le veréis conceder unas tablas fáciles, luchará cual gladiador para intentar obtener la ventaja más nimia que poder explotar. Por ejemplo, en la última partida del Campeonato del Mundo, le valía con unas tablas ante su contrincante, el indio Anand, para lograr el cetro. Y sin embargo, tras nueve partidas seguidas ante el mismo Anand, y este habiendo planteado una partida con la que se podrían lograr tablas rápidas, Carlsen decidió buscar los mínimos resquicios, decidió torturar su mente cinco horas más en lugar de firmar las tablas e irse a celebrarlo. Al final no logró ganar la partida, y firmaron las tablas, pero este hecho muestra muy bien el carácter de lucha que presenta el noruego.

Ajedrecistas en la brega (Carlsen-Anand)
Hay que decir además, que Magnus es un campeón carismático y con los pies en la tierra, por ello quizás es uno de los pocos ajedrecistas desde Kasparov que ha logrado patrocinadores y acuerdos comerciales. Llegando los mismos hasta hacer anuncios publicitarios para la marca de ropa G-Star con la actriz Liv Tyler. Esta gran imagen ayuda también a la difusión del ajedrez allá por donde pasa y a lo cual parece estar comprometido. Este cambio en el poder ajedrecístico mundial representa nuevos aires para este deporte, que en los últimos años parecía no tener grandes figuras capaces de difundir el mismo así como de despertar el interés de la gente. Ahora solo queda una duda, ¿habiendo Carlsen alcanzado la cima de este deporte a tan temprana edad, será capaz de encontrar nuevos retos que alimenten su pasión, se mantendrá? Esto aún nadie lo sabe, lo que sí es seguro es que sin un gran esfuerzo y una gran capacidad de sacrificio nunca habría llegado donde está.

A quien le interese saber más sobre el Campeonato del Mundo puede ver resúmenes de las distintas jornadas así como galerías de fotos en los siguientes enlaces.

Ponte en marcha

Ayer era tarde, hoy lo es aún más, así es que ponte en marcha.

El camino hacia el éxito


Encuentra aquello que te apasiona y dedícate a ello, esfuerzate y no cejes en tu empeño. No permitas que alguien te diga que no puedes hacer algo, hazlo y punto. También te voy a contar un secreto, tirado en el sofá de tu casa no vas  a lograr tu meta, es una pena pero nadie te va a regalar nada. Por ello, tienes que salir de tu zona de confort para lograr alcanzar aquello con lo que sueñas. Quizás no salga bien la primera vez, y por supuesto el camino no será fácil, es más, probablemente el sendero sea escarpado y rocoso y tendrás momentos de crisis, pero todo ese esfuerzo bien lo vale tu sueño, ¿no crees? Ponte en marcha.

sábado, 16 de noviembre de 2013

Rubén, Asela y la Granja Cantagrullas

Rubén Valbuena es un joven de 32 años nacido en Sabadell, pero de padre castellano y madre navarra. Se graduó en Geografía por la Universidad de Valladolid y emprendió un viaje a tierras lejanas, concretamente a Brasil. Posteriormente se doctoró y trabajó en diversos países, sobre todo en América Latina. De esta guisa andaba Rubén hasta que desembarcó en Francia donde estuvo dando clases en la Universidad de París y fue consultor de la ONU. Cualquiera podría pensar que con las posiciones que ocupaba, Rubén decidiría asentarse, pero no fue así.

Cerca de los treinta años este hombre tenía cuatro hijos con su mujer de ascendencia francesa. Ninguno de los dos quería que sus hijos creciesen en una gran ciudad, deseaban mostrarles la naturaleza como ellos la vivieron de pequeños, más allá de ciertas escapadas al campo los fines de semana. Este fue el origen del proyecto Granja Cantagrullas.

Logo Granja Cantagrullas
Logo Granja Cantagrullas
La familia de Rubén poseía un hatajo de ovejas en un pequeño pueblo al sur de la provincia de Valladolid, Ramiro, que contaba tan solo con 8 habitantes. Rubén y su mujer aprendieron técnicas de quesería francesas teniendo como objetivo importarlas a la Península. Estuvieron durante más de un año buscando la financiación necesaria para llevar a cabo el proyecto, lo intentaron todo, capital riesgo, entidades de crédito público- privada, banca ética, capital privado… Pero la solución no llegó hasta que dieron con lo que se denomina un Business Angel. A partir de ese momento, encontrar el capital que les faltaba para poder poner en marcha el proyecto fue en cierto modo más sencillo.

Asela y Rubén vieron una posible oportunidad en la elaboración de quesos a partir de leche cruda de oveja lo cual era una gran novedad en el ámbito español, de esta forma elaboran quesos con técnicas francesas pero con leche autóctona. De hecho, Granja Cantagrullas fue la primera quesería en España que logró una Autorización Sanitaria para elaborar quesos de leche cruda de oveja, frescos y tiernos. Los nuevos quesos, nunca antes vistos en el panorama nacional, y las técnicas supusieron un gran vendaval en el sector de los lácteos españoles. Tanto es así, que una gran cantidad de queseros de todos los puntos del país se acercaban a Granja Cantagrullas para tratar de aprender las nuevas técnicas de elaboración, las cuales Rubén y Asela les mostraban con mucho gusto, pues como bien dice Rubén “no hay mejor forma de evolucionar que compartir”. Las visitas de los queseros se multiplicaron, hasta el punto de tener que organizarlos por días para que las visitas no impidiesen el normal funcionamiento de la quesería.

Granja Canatagrullas
Granja Cantagrullas
Los éxitos se siguieron sucediendo hasta el punto que en la actualidad realizan la elaboración de quesos por encargo y suministran distintos tipos de quesos a  restaurantes de alta cocina, algunos de los cuales cuentan con diversas Estrellas Michelín en su haber. Actualmente también realizan estancias internacionales con distintos queseros del mundo, lo cual favorece de forma muy notable el intercambio de ideas, así como la posibilidad de estar siempre atentos al sector que les ocupa no dejando nunca de evolucionar.

Granja Cantagrullas, así como Rubén y Asela, pueden enseñarnos diversas lecciones. En primer lugar el esfuerzo y dedicación que puede suponer llevar a cabo una idea, ellos tuvieron que estar más de un año buscando financiación para su proyecto, hasta que alguien confió en ellos. Antes de meter la cabeza en el sector, se dedicaron a conocer el mismo en el ámbito en el que ellos iban a entrar, lo cual les permitió confiar aún más en su proyecto al ver que en España nadie fabricaba quesos en la forma y con las técnicas que ellos pretendían hacerlo. 

Además, nos muestran que la innovación y el emprendimiento no se encuentran únicamente recluidos en las grandes ciudades y tan solo en el sector tecnológico, ellos han sido capaces de crear una empresa que elabora quesos, y el queso se lleva haciendo hace siglos. Y por último está el intercambio de ideas como medio para evolucionar y crecer, es probable que a la creación de esta quesería también ayudase los periplos de la pareja por el mundo, de hecho, las técnicas que comenzaron a utilizar eran francesas. Ellos, conocedores de que el intercambio les hará evolucionar no han cejado en su empeño, primero con los queseros nacionales y ahora con internacionales.

Quesos de Granja Cantagrullas
Quesos de Granja Cantagrullas
Para terminar os dejo diversos enlaces a artículos y vídeos sobre Granja Cantagrullas.

sábado, 9 de noviembre de 2013

Muévete, ¿qué vas a hacer para que el mundo sea impresionante?


Muévete, busca aquello que te apasione y aférrate a ello. Nunca te resignes, puedes elegir tu futuro, puedes lograr tus sueños, puedes cambiar el mundo, tu mundo. Sal de tu zona de confort para lograr tus metas, desde el sofá no vas a llegar a ningún sitio. Las personas somos impresionantes, superheroes, y tu eres uno de ellos.

PUEDES ALCANZAR TUS SUEÑOS SI TE ESFUERZAS Y VENCES TUS MIEDOS
Y POR SUPUESTO, TRATA DE SER FELIZ.